lunes, octubre 16, 2006


LA COLUMNITA

Vuelta al Punto de Partida


Por Santos Oaxaca


LA elección espuria, al modo de ver de millones de mexicanos, de Felipe Calderón nos lleva de retorno a los tiempos de la dictadura perfecta desde Manuel Avila Camacho a Vicente Fox: presidentes de la república que no eran líderes auténticos del pueblo, sino personeros de una forma de organización del poder muy corrupta y facciosa y cómplices, como añadido, de una monstruosa simulación democrática. Esos presidentes gobernaban en nombre del pueblo --que, a su vez, simulaba que los elegían-- para una élite de políticos y empresarios enriquecidos al amparo del Estado. Ante esa experiencia histórica, es predecible nuestro futuro inmediato, el sexenal calderonista: más desigualdad, mayor injusticia y acumulación de iniquidades. Más crisis. Y más pobreza. Más priísmo azul.