miércoles, octubre 11, 2006

TEMA TRASCENDENTE DEL DÍA

Asimetrías

¿Quién Mató a Betzabé? (2 de 3)

Por Fausto Fernández Ponte

I
CONFESADO que hubo --bajo coacción (acoso, insultos y amenazas) y tortura psicológica y otras chicanas-- Luis Hernández Granados, se le dicta auto de formal prisión. Está en el Reclusorio Norte.
Se procedió, no previa, sino posteriormente, a designarle, por ministero de ley, un defensor de oficio.


El abogado Ernesto Varela Pavón llegó tarde al interrogatorio. No volvió a aparecer.
Menciónese que, al decir del procesado, el señor Varela Pavón no asesoró al entonces sospechoso Hernández Granados acerca de sus derechos constitucionales.

Este abogado fue traído al caso a instancias de su colega Patricia Infante Ocampo, conocida de la doctora en medicina Teresa Pacheco Padilla, quien conoce al procesado desde niño.

Así, sin ser defendido realmente, el asignado defensor de oficio --en realidad, defensora, María L. Leticia Gómez Almeyda-- promovió de inmediato un juicio sumario.

Señálese que un juicio sumario --breve, rápido, expedito-- es opuesto a lo que aconsejaría el sentido común, que sería un juicio ordinario, comprensivo.

Precísese que un juicio ordinario implica actividad jurídica de las partes y del juez pendiente a la obtención de una resolución vinculativa.

II

La defensora de oficio rechazó, con tajante tozudez, que el procesado, el citado señor Hernández Granados, solicitara amparo contra el auto de formal prisión.

Y aunque está pendiente la sentencia, la aludida defensora Gómez Almeyda desaconsejó a los familiares del procesado a no amparar contra aquella. "Ya confesó, no hay nada que hacer", les dijo.

¿Ineptitud? ¿Irresponsabilidad? ¿Dolo? La señora Gómez Almeyda no se ha mostrado proclive a una defensa real del señor Hernández Granados, al decir de los familiares de éste.

Y sí se le percibe, por ello, señalan, como cómplice a que continúe la fabricación de responsabilidad al señor Hernández Granados en la comisión del homicidio de su compañera Betzabé.

Esa confesión coaccionada de culpabilidad --extraída, reitérese, bajo acoso y tortura psicológica-- va a contrapelo de una conducta del fiscal Gustavo Roberto Ruiz Cabañas y de los agentes judiciales encargados del caso.

Para los agentes, lograr la confesión de autoría del homicidio a como diese lugar y a toda costa --mediante acoso y tortura psicológica-- la confesión es su propósito. Obtienen bonos por ello.

Suponen los familiares del señor Hernández Granados que también son premiados el agente del Ministerio Público, el ya citado señor Ruiz Cabañas, y la oficial secretaria del MP, Mónica A. Rivera Hernández.

III

Por ello, desestimaron que la confesión es inconsistente e incongruente: el procesado no estaba con la occisa al ser ésta asesinada. Estaba en su trabajo, como lo confirmó su jefe, Reynaldo Ocampo Manríquez.

El señor Ocampo confirmó que su trabajador estuvo con él todo el tiempo, hasta las 14:30 horas. El homicidio ocurrió entre las 12 y las 14 horas.

Tampoco hay huellas dactilares en el arma blanca con el que se asesinó a Betzabé. La hija de ésta, la menor Estudillo López, confirmó que el procesado jamás la acosó sexualmente.

Ello desvanecería el motivo del crimen esgrimido por los agentes judiciales, el fiscal y y hasta la abogada defensora. Y el motivo, en cualesquier casos criminales, es elemento importantísimo.

Estos hechos descubren la fabricación. ¿Por qué razones las autoridades policiacas fabrican delitos y delincuentes y así, con fabricaciones, se los presentan a los jueces?

La respuesta señala que se privilegia esa práctica --que comprende acoso, amenazas, tortura psicológica, etcétera-- para simular que la autoridad es muy eficiente y aclara y resuelve los crímenes.

Dicho de otro estilo: es para que las autoridades --en este caso la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal-- ofrezca a la sociedad estadísticas favorables de su actuación.

Lo ominoso de esta práctica es que, hágase la pertinente salvedad, también se extiende a todas las procuradurías del país, lo mismo en Baja California que en Quintana Roo, desde Guerrero a Veracruz.
ffernandezp@prodigy.net.mx


Glosario:

Chicanas: artimaña, acciones de mala fe, principalmente en el ámbito policiaco y judicial.

Tozudez: persistencia en una idea fija, y negativa a dejarse convencer.