TEMA TRASCENDENTE DEL DÍA

Bueno...¿y Madrazo?

Por Leopoldo Mendívil*

EL inmenso ruido con que desde julio pasado Andrés Manuel López Obrador envolvió al país, hizo que la gran mayoría de la población dejara de pensar en su odiado paisano Roberto Madrazo, pero vale preguntar si al menos los priístas lo recuerdan.., y lo perdonan.

Todo indica que no hay olvido y muy probablemente tampoco perdón pues, de seguro, uno de estos días los madracistas que tuvieron en sus manos ¿y en sus cuentas..?, los recursos destinados a las campañas electorales de este año reciban sendas llamadas para que, por favor, vayan a aclarar algunos numeritos que no cuadran…

Por lo pronto, estos madracistas buenos para las finanzas.., pero suyas y del jefe, flotan por ahí sin hacerse, en su mayoría, muy visibles, pero pronto comenzarán a sentir un frío peor que el de estos días en las miradas reclamantes de sus correligionarios.

No es cierto que el PRI vive su agonía final. Aun con todas las pérdidas sigue teniendo la mayor militancia en el país, pero jamás había compartido la pobreza con todos aquellos a los que mantuvo en ese estado durante sus décadas de poder y esto, le aseguro, no implica un olvido de los avances que
tuvo el país en esos años, pero con nada los que pudo haber logrado con otras políticas y sobre todo con otras costumbres éticas y morales de los priístas poderosos y de sus socios, los empresarios encumbrados.

Roberto Madrazo ha sido un digno exponente de esos priístas. Su padre lo fue también; la diferencia estriba en la ideología que don Carlos sí tuvo y su hijo, con su conocido pragmatismo, prefirió desechar su proyecto e ignoro si don Carlos fue afecto a la traición o Roberto la adquirió en otra tienda.

Lo cierto es que fue uno de sus instrumentos más utilizados y quizá la primera aplicación en alta escala fue contra su propio hermano mayor, el llamado como el padre y quien había iniciado una carrera política que cortó cuando Roberto le anunció que él iba a comenzar la suya. "Yo vivía en su casa —solía recordar risueñamente el hermano menor— y Carlos dejó de hablarme más
de un año…"

Los priístas con buena memoria recuerdan que, contra la prédica unionista de su padre, Roberto Madrazo provocó el mayor y más dañino cisma en ese partido, cuando buscó por primera vez la candidatura presidencial, cuya plataforma de marketing fue el golpeteo cotidiano contra el gobierno priísta de Ernesto Zedillo, contra el propio partido y contra el precandidato rival, Francisco Labastida.

Madrazo culpó siempre de su derrota "al aparato del Estado", pero lo cierto fue que equivocó la estrategia suponiendo que los consejos de sus asesores gringos y mexicanos eran novedosos, atractivos y eficientes.., y todos se llevaron el chasco de la vida.

Madrazo no sólo perdió la candidatura presidencial en 1999; además sembró rencores por todas partes, incluso con Carlos Salinas, quien nunca le perdonó totalmente haberlo presentado como el
titiritero que movía la boca de Labastida en el último spot de la precampaña.

Pero la obsesión presidencial ya había anidado en su cerebro y como Tabasco sin duda había dado para rellenar mucho más que un cochinito; y con el saqueo que José Murat hizo de las arcas de la empobrecida Oaxaca se hizo del PRI, no para mejorarlo y reivindicarlo, sino para hacerlo el instrumento que finalmente le llevara a Los Pinos, pero en ese tránsito incrementó el número
de víctimas de su tendencia a la traición, para monopolizar el poder; y como no es claro el destino de los recursos destinados a las campañas; esto es, también las de gobernadores, senadores y diputados federales y no sólo la suya, bueno, pues hay un grupo de miembros del Consejo Político Nacional que
están convocando a la unión de cuantos miembros del partido quieran firmar una propuesta de acuerdo para presentar al resto de los consejeros para iniciar una serie de auditorías sobre el paradero real de esos fondos, y sí de ello resulta algún manejo ilícito, propondrán que no sea el partido quien cargue con los costos que pueda establecer la legislación electoral, sino
quienes resulten responsables; esto es, que primero paguen los costos del PRI ante el IFE; después que paguen lo que los códigos Penal y Civil determinen y cuando las respectivas sentencias oficialicen sus responsabilidades, sean pública, enérgica y vergonzosamente expulsados porque ya es hora de que quien se la hace al sistema político priísta se la pague como es justo y equitativo…

Esto que le cuento ya no tarda en suceder. El documento está en proceso de elaboración y conjuntamente se realiza la convocatoria para firmarlo y afiliarse al movimiento.

Madrazo está políticamente acabado pero lo peor de su futuro depende del resultado que arrojen esas auditorías.

Negro, negro está el camino…

l.mendivil@delfos.com.mx