TEMA TRASCENDENTE DEL DÍA
La Columna Oblicua
God bless Meksicou!
Por Rodrigo De Sahagún
SI ves un mapa del continente americano y te concentras sólo en Norteamérica, pareciera que México se está retorciendo por cargar a Estados Unidos. Bastante irónico, esto me lo enseñó alguna vez una maestra de geografía en la secundaria. Quizá sea cierto que E.U.A. nos está doblando o doblegando. Talvez hemos permitido eso a través de los años y cuando nos dimos cuenta ya era muy tarde, el odio hacia el gringo creció mas no a su modus vivendi . Está de más decir que vivimos empapados del modelo consumista estadounidense: comida, ropa, música, televisión, etc.
No sé en que momento nació el reproche hacia el norteamericano, no estoy seguro, quizá fue durante la guerra de Texas o antes. Pero digamos que de dos siglos para acá el gringo ha sido nuestro antagonista por excelencia. Lo catalogamos en un papel de idiota, prepotente, racista, siempre decimos que no tiene identidad, que no tiene historia cultural, en pocas palabras que es un ojete. Al igual ellos nos han encasillado dormidos bajo un nopal, envueltos en un sarape y sombrerudos. La historia entre México y E.U.A. ha sido ríspida tanto culturalmente como a nivel gobierno y lo más seguro es que vaya pa' largo brother.
Los gabachos tienen a Superman, nosotros tenemos al Chapulín colorado. Ellos nos ganaron California y Nuevo México, nosotros ya lo recuperamos con millones de inmigrantes viviendo allá. E.UA. dejó fuera a México del mundial de futbol Korea-Japón 2002, México deja fuera del mundial de béisbol a E.UA. 2003 y 2006. Ellos tienen a Freddy Kruegger, nosotros tenemos a Elba Esther Gordillo. Un centro comercial de la ciudad de México estás repleto de empresas transnacionales mientras que en uno de California está lleno de indocumentados trabajando. La globalización es imparable, no nos rezaguemos con líderes populacheros que presumen de una identidad y se auto-proclaman presidentes, es el colmo del absurdo.
A decir verdad no somos tan distintos a los "güeritous", los condenamos de levantar un muro en la frontera norte, mientras que en nuestro propio país denigramos o ignoramos a los indígenas.